sábado, 14 de junio de 2014

Helado de chicle


       El otro día me fuí de casa con la idea de poner la base de la heladera en el congelador. ¡Ya es tiempo de helados!
Cuando fuí a mi librería favorita ( El Paso de La Laguna), tenía el libro Polos y Helados, de Sandra Mangas.
No pude evitarlo y ya forma parte de mi colección de libros de cocina.
La verdad es que está muy completo y no sólo de helados muy sencillos de hacer, sino de polos de hielos con todo tipo de sabores. (helado de mojito...voy a por tiiiii)
        Esta receta que les ofrezco hoy sirve como base para otro tipo de sabores, ya que utiliza pasta saborizada. Recomiendo las de la marca Home Chef, porque ofrecen todo tipo de sabores intensos. Escojo aquellos que son difíciles de hacer, como la de coco, violetas o esta de chicle a la que le he sacado bastante provecho. Desde magdalenas, cremas para rellenas bizcochos, hasta este helado que está de miedo.
En el libro de hecho, la receta que escogí es el de pistacho, realizado con este tipo de pasta de sabor. La de chicle, ni siquiera necesita colorante porque deja un suave color rosa (cuanto menos colorante extra, mejor)

Ingredientes:

-250 ml. de leche.
-500 ml. de nata para montar.
-150 grs. de azúcar.
-Un par de cucharadas de pasta saborizada (en mi caso de chicle)
-Una cucharadita de maizena.
-3 yemas de huevo.
-Colorante (si es necesario)

Elaboración:

        Preparamos un bol con agua fría y hielo. Reservamos.
Mezclamos 50 ml. de leche con la maizena.
En un cazo mezclamos 200 ml. de leche, con 250 ml. de nata y el azúcar. Llevamos a ebullición y separamos del fuego, pero sin apagarlo.
Batimos las yemas y añadimos en forma de hilo a la mezcla de nata y leche, sin dejar de batir para que no se cuaje. Agregamos la mezcla también de maizena, la pasta con sabor y el colorante, si lo vemos demasiado claro.
La cantidad de pasta viene determiada por la intensidad de sabor que queramos darle.
Volvemos a poner el cazo en el fuego revolviendo de vez en cuando mientras se va espesando.
Introducimos el cazo en el bol que teníamos preparado con agua y hielo, pero siempre sin que el agua toque la crema.
Damos vueltas mientras se va enfriando. Añadimos los 250 ml. de nata restante.
Cuando esté totalmente fría, metemos la crema en la nevera por lo menos un día completo.
Si tienes heladera, la base tendrá que estar al menos 24 horas antes en el congelador. Al día siguiente se pone la mezcla en la heladera, siguiendo las instrucciones del fabricante.
Yo la puse 10 minutos y quedó cremosa.
Después, es conveniente dejar el helado unas horas más en el congelador para que tome cuerpo.
         Si no tienes heladera, Sandra recomienda meter la mezcla en un recipinete hermético en el congelador durante al menos 2 o 3 horas. La sacaremos cada media hora para batir con un tenedor, para que no se cristalice. Tapamos el helado con papel sulfurizado y mantenemos 24 horas.
         Es buenos sacar el helado 10 minutos antes del consumo, para trabajar mejor con él.
¡A disfrutar del verano!

1 comentario:

  1. Helado de chicle hecho por la princesa chicle jeejej. Hermana a ver cuando rula ese helado, por cierto sabes que mi favorito y el de Iván es el de chocolateeeeee

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